La Diócesis de Santa Marta es un organismo vivo cuya organización interna debe ser ágil y eficaz para facilitar su adecuado funcionamiento institucional. Sin la necesaria cohesión de todos los miembros vivos de la Diócesis no sería posible el cumplimiento de su misión: el anuncio de Jesucristo y de su Evangelio, porque “la Iglesia existe para evangelizar” (Pablo VI).

Sin embargo, el motivo de fondo para la conformación de esta visión orgánica de la Diócesis viene de la naturaleza propia de la Iglesia, el Cuerpo de Cristo, el Sacramento del Padre. San Pablo en la carta a los corintios: “Porque así como el cuerpo es uno, y tiene muchos miembros, pero todos los miembros del cuerpo, siendo muchos, son un solo cuerpo, así también Cristo. Porque por un solo Espíritu fuimos todos bautizados en un cuerpo, ya judíos o griegos, ya esclavos o libres; y a todos se nos dio a beber de un mismo Espíritu” (1 Cor 12, 12-13).

Que todo el Pueblo De Dios encuentre su lugar y su espacio en la misión De la Iglesia para que caminando juntos vivimos en actitud sinodal de comunión, participación y misión.